Efe, Comunidad Valenciana
El eurodiputado del grupo Los Verdes David Hammerstein aseguró ayer que la Comisión Europea llevará a los tribunales el próximo 21 de marzo la Ley Urbanística valenciana porque « no cumple » con la directiva europea de Contratación Pública. Así lo manifestó en declaraciones a los periodistas en Almería, durante el encuentro mantenido en la Delegación del Gobierno de la Junta de Andalucía entre representantes de la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo y de la Consejería de Obras Públicas. Hammerstein explicó que la medida por parte de la CE se adoptará con objeto de frenar un modelo urbanístico «fuera de cualquier control » que « hace caso omiso» a la legislación europea ambiental. La normativa urbanística valenciana, comunidad a la que la delegación llegó ayer para visitar un total de 12 municipios, violaría, según el eurodiputado y miembro de la Comisión de Peticiones, Directiva Hábitats, Directiva de Evaluaciones Ambientales y la de Evaluaciones Estratégicas. Además, la figura del urbanizador incluida en la legislación valenciana incumpliría sobre todo con la Directiva de Contratación Pública, por su « falta de transparencia, igualdad de trato y la existencia de contrataciones y adjudicaciones no abiertas a concurso público », añadió. Hammerstein respondió a las críticas recibidas por parte del president de la Generalitat, Francisco Camps -quien manifestó que la delegación pretende « distorsionar la campaña electoral » de forma «indigna e injustificada» - que «sólo falta que acabe culpando a la UE de la burbuja inmobiliaria» .
Una oleada de libertad recorre Europa. Miles de jóvenes ciberactivistas, una multitud de pequeñas empresas innovadoras y muchas instituciones públicas comprometidas están apostando por nuevas formas de compartir la información y, en el proceso, están inventando una nueva cultura más abierta y una economía más igualitaria.
La regulación de las posibilidades futuras de Internet, el software y las nuevas generaciones de telecomunicaciones se ha convertido en un campo de batalla decisivo para nuestras sociedades. Por un lado están las fuerzas de imaginación, cooperación y diversidad y por el otro, los monopolios de siempre que buscan construir altos muros privativos ante el libre flujo de ideas y datos.
El debate europeo sobre las patentes de software, por ejemplo, es arduo y la relación de fuerzas es desigual. Hay una presión muy fuerte a favor de instaurar el sistema americano de patentes que asfixiaría a la innovación de las nuevas empresas pujantes y restringiría la libertad de los consumidores. La instauración de un duro régimen de propiedad intelectual helaría la innovación de nuevos actores al estimular el chantaje de unas vías judiciales de un alto coste que haría que el miedo se extendiera por toda la red y as grandes empresas camparan a sus anchas.
Se discute también, en el ámbito europeo, el posible endurecimiento y ampliación de las medidas criminales contra la violación de la propiedad intelectual cuando hasta ahora a la mayoría de estas ofensas solo se aplicaba el derecho civil. Además, se libra una discusión sobre la delimitación de los derechos de los consumidores en la economía digital.
Otras cuestiones importantes planteadas es la Directiva de Televisión sin Fronteras que decidirá sobre las televisiones del futuro y su relación con Internet o el debate sobre espectrum que se trata del control y acceso social de las frecuencias inalámbricas. De gran importancia serán, además, las medidas emprendidas para cerrar la brecha digital entre el Norte y el Sur, entre las ciudades y las zonas rurales y entre los ricos y pobres, en el camino de conseguir “el acceso universal”. No menos crucial es cómo potenciar la creación de “clusters” cooperativos de nuevas iniciativas empresariales en las tecnologías de información o la imprescindible implicación del mundo de la informática e Internet en la lucha contra la crisis climática y ecológica global.
Los Verdes queremos un máximo de transferencia e intercambio libre de cultura, conocimientos científicos e informaciones técnicas. Debemos evitar aquellas patentes o leyes que puedan ser un obstáculo a la innovación para pequeñas y/o jóvenes empresas. Por el contrario, todos aquellos incentivos que fomenten el compartir de conocimientos y la transferencia de tecnologías han de promoverse, para que las empresas, la sociedad civil y las universidades puedan desarrollar, gracias a dicha intercomunicación, puentes entre la investigación y la necesaria renovación económica y tecnológica en nuestras vidas. Tenemos que tejer una tupida red libre de interoperatividad técnica, política y cultural. Esta será la red de una economía donde “lo pequeño es hermoso” y donde el voraz “gen egoísta” es sustituido por “el chip cooperativo" que es la mejor estrategia para unas sociedades más justas y unas economías vibrantes.
David Hammerstein, Eurodiputado de Los Verdes
EUROPA PRESS | BRUSELAS
El eurodiputado de los Verdes, David Hammerstein, acusó hoy al presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, de mostrar una "ignorancia escandalosa" sobre el funcionamiento del Parlamento Europeo, y una "falta de respeto" por la aplicación del derecho comunitario en la Comunidad Valenciana. Hammerstein hizo estas declaraciones en respuesta a las críticas de Camps contra la Eurocámara, de la que dijo que se entromete en la campaña electoral enviando una visión sobre urbanismo a Valencia la semana que viene.
Hammerstein subrayó que la comisión de Peticiones del Parlamento organiza delegaciones de investigación "no por motivos partidistas sino en respuesta a peticiones planteadas por ciudadanos y grupos cívicos de una región o un país concreto". "En este caso hay muchas peticiones relacionadas con el 'boom urbanístico' valenciano que están siendo estudiadas tanto por la comisión de Peticiones como por la Comisión Europea", señaló.
"Para el señor Camps todo es una cuestión de imagen y marketing, pero lo que 'mancilla' y mancha la imagen de la Comunidad Valenciana es la palpable realidad del salvaje oeste urbanístico fomentado por el propio Camps en los últimos años", criticó Hammerstein a través de un comunicado.
Señaló que es "falso" que se produzca una "atención exagerada" del Parlamento Europeo al urbanismo valenciano y puso como ejemplo que recientemente se han mandado misiones a Italia (sobre el AVE) y Malta (sobre la caza) y pronto habrá otra a Polonia (autovías en zonas protegidas) sobre "asuntos de alta sensibilidad política y ambiental y con gobiernos regionales y estatales de distinto color político".
El eurodiputado de los Verdes negó además que la delegación "busque castigar al PP" o que haya una mayoría socialista, y dijo que los parlamentarios visitarán distintas localidades gobernadas por el PSOE tanto en Alicante como en Almería. Afirmó que es la decisión del PP europeo de no participar en la delegación la que evita que ésta tenga una mayoría conservadora, puesto que hasta ahora han confirmado su asistencia el conservador polaco Marcin Libicki y el socialista británico Michael Cashman.
"No es verdad que estemos ya en campaña electoral. Todavía faltan más de dos meses antes de empezar la campaña. Si el Parlamento Europeo tuviera que inhibirse ante las múltiples y largas precampañas en cada país y región tendríamos que paralizar buena parte de nuestra actividad parlamentaria", concluyó Hammerstein.
¡TÚ PUEDES PARTICIPAR! ¡Muévete por el clima y por tú salud! El tráfico urbano es responsable del 40% de las emisiones nocivas del transporte. Así y todo, la mayoría de viajes de menos de 5 kilómetros se realizan en coche. Además del cambio climático, el tráfico daña la salud, contamina el aire y nos hace dependientes de la importación de petróleo. Caminar o ir en bicicleta cada día, además, es más sano. Los Verdes actuamos para una planificación sostenible de las ciudades que acerque los servicios a las personas y reduzca la necesidad de desplazamientos motorizados individuales. Trabajamos por un transporte público eficiente, un ciclismo seguro y una mejor calidad de vida con menos tráfico urbano. ¡No deteriores el clima, compra productos locales! Una gran parte de la huella que dejamos en el clima depende de muchos de los productos que compramos. Además de las emisiones relacionadas con la extracción de materias primas, su manufactura y eliminación final, las emisiones derivadas de su transporte también contribuyen en gran medida al deterioro del clima. Un kilo de manzanas transportado desde Nueva Zelanda causa un kilo de emisiones de CO2, cuando las manzanas locales no causarían más de 50 gramos. Comiendo alimentos ecológicos producidos localmente, podrás disfrutar de una comida más sabrosa y fresca, y contribuirás al recorte de las emisiones. Los Verdes favorecemos a los productores y a la economía local. Los Verdes trabajan para que los precios de los productos reflejen la realidad de los impactos negativos ambientales generados por el transporte, y actúan para sustituir el transporte de mercancías por carretera por el transporte por ferrocarril. ¡Apuesta por los electrodomésticos eficientes! El consumo de electricidad de frigoríficos, lavadoras, televisiones y otros electrodomésticos puede variar mucho. Los electrodomésticos con una alta eficiencia energética consumen mucha menos electricidad y suelen ser de mejor calidad. Busca los modelos etiquetados con A++; un frigorífico de alta eficiencia consume alrededor de cinco veces menos la energía que consume uno de media en Europa, y además te ahorrarás mucho dinero a lo largo de su vida útil. Cambia las bombillas incandescentes por fluorescentes compactos (CFLs). Los fluorescentes compactos gastan cuatro veces menos energía, duran ocho veces más que una bombilla incandescente y te ahorrarán dinero a pesar de su precio de compra superior. Los Verdes luchamos por unas leyes europeas que exijan estándares de eficiencia para que los productos que utilizan energía minimicen su impacto medioambiental y para que, además, ahorremos dinero. ¡No te quedes en stand-by!
El 85% de la electricidad utilizada por los aparatos electrónicos se consume cuando en realidad no están encendidos. Tu cargador de móvil está usando energía si está enchufado, aunque no se esté cargando el teléfono. Verifica los aparatos que compras: la pérdida en stand-by debería ser inferior a 1 vatio. En Europa, el consumo en stand-by de una televisión varía entre 0,1 y 20 vatios. Dejar un ordenador encendido durante todo un año podría costarte casi tanto como el consumo eléctrico total de un hogar de alta eficiencia eléctrica. Los Verdes están luchando por una ley europea que exija a los productores un límite de consumo en stand-by no superior a los 0,5 vatios por aparato. ¡Calefacción y aire inteligentes!
El consumo de calefacción y aire acondicionado en los hogares difiere enormemente a lo largo y ancho del planeta, sin importar las condiciones climáticas y sin diferencias de comodidad. Bajar la temperatura 1ºC en su casa te ahorrará entre un 5 y un 10% del consumo total de energía. Piensa en el uso de la energía cuando cambies de casa o construyas una nueva. Busca soluciones de energía renovable, y evita la calefacción eléctrica. Los hogares inteligentes utilizan solo una fracción de energía en comparación con un hogar de tipo medio en Europa. Los Verdes actuamos a favor de estándares de aislamiento estrictos en edificios y en el desarrollo de “casas pasivas” y “casas energy-plus”, que producen su propia energía, o más. Los Verdes exigimos objetivos de ahorro energético para que llegue más tecnología sostenible al mercado. ¡Consigue energía verde!
Gracias a los políticos Verdes, los consumidores y consumidoras tendrán que estar informados de las fuentes de electricidad de acuerdo con la ley europea. Al poder optar por energía verde de fuentes renovables, podrás evitar una gran parte de las emisiones que produces. Cada vez que la cantidad de energía eólica instalada se dobla, el precio de la tecnología cae hasta un 20%. Puedes contribuir al desarrollo de tecnología para energías renovables y abaratarlas. Los Verdes actúan para conseguir que al menos un 25% de la energía total provenga de fuentes renovables para 2020 en Europa.
¡Elige un coche más limpio! La mitad de todas las emisiones de gases invernadero del transporte proviene de coches. Un coche deportivo se traga tres veces más gasolina que un coche pequeño y eficiente. Piensa a lo grande y elige lo más pequeño, si es que realmente necesitas uno. Cada vez habrá más coches híbridos de electricidad y gasolina, y otros tipos de coches más ecológicos. Los Verdes luchan por vincular legalmente los límites de emisión de gases invernaderos para coches nuevos y para que los impuestos y costes añadidos a los vehículos reflejen las diferencias en sus emisiones y la carga ecológica total que genera cada tipo de vehículo. ¡Las vacaciones… más cerca de casa! Aunque menos del 5% de la población ha viajado alguna vez en avión, la aviación representa ya el 10% del efecto invernadero global. 1 tonelada de CO2 te llevarán a 3.000 Km. de distancia, un coche a 7.000, y un tren a 17.000. Lo mejor es no volar. Los Verdes luchan por poner límites a las emisiones globales de la aviación, poniendo freno al impacto de los vuelos de la Unión Europea sobre el clima para 2008. Los Verdes trabajamos para mejorar los entornos dedicados al ocio en los lugares donde vivimos. ¡Piensa y actúa en verde!
Las noticias que confirman el consenso científico existente en torno a la gravedad del cambio climático global aparecen casi todos los días. Fenómenos numerosos y variados lo atestiguan: las pruebas de que los casquetes polares se están derritiendo, las sequías, las inundaciones, las tormentas, la desaparición de especies animales, la proliferación de enfermedades debido al rápido aumento de la temperatura global. El clima se nos está yendo de las manos. Los encargados de tomar decisiones en el ámbito local, regional y nacional no están comprometidos en la lucha responsable para resolver el problema. ¡Únete a los Verdes! Lucha activamente en una organización ecologista y ¡utiliza tus propios recursos para el cambio!
David Hammerstein
1. DEL PELOTAZO URBANÍSTICO AL URBANISMO CON VOCACIÓN COLECTIVA
Es necesario desarrollar un urbanismo con clara vocación colectiva y una clara definición del interés público, social y ambiental para justificar cada nueva urbanización tal como ha exigido el Parlamento Europeo en su informe sobre el urbanismo valenciano. Urbanizar no es un valor en sí mismo. Ha de aplicarse del Principio de Precaución antes de impulsar cualquier nuevo proyecto urbanizador para valorar en su integridad los posibles impactos y daños ecológicos, sociales y culturales que genera. Las nuevas construcciones deben guiarse por un desarrollo lento y no destructivo, que no traspase la capacidad de carga ambiental y que no altere los equilibrios de los ecosistemas y de las zonas ricas en bienes y capitales naturales.
2. DE LA AUTONOMÍA SECUESTRADA A LA PLANIFICACIÓN SUPRAMUNICIPAL
No dejemos a los municipios solos ante el peligro en la tarea de frenar “la actual fiebre urbanística”. Se hace necesaria y urgente una planificación territorial supramunicipal con fuertes objetivos sociales y ambientales. Reducir la actual autonomía municipal sobre la planificación y la zonificación de los usos del suelo los haría más resistentes a la presión de las grandes constructoras que actualmente acosan a los municipios. En muchos municipios la autonomía municipal alimenta los voraces abusos urbanísticos.
3. LUZ Y TAQUIGRAFOS
La ciudadanía urbana exige condiciones de transparencia, de igualdad de trato y participación pública en las contrataciones públicas de los agentes urbanizaciones. Han de fijarse estrictas reglas para evitar los conflictos de intereses, los abusos, el favoritismo y los beneficios desmedidos en las recalificaciones urbanísticas y en la fijación de precios. La Directiva Europea de contratación pública debe ser aplicada con rigor. Hay que evitar el solapamiento opaco de los poderes públicos y de los intereses privados en la selección de proyectos y en la constitución de empresas mixtas urbanizadoras.
4. ESTADO DE DERECHO FRENTE A LA CIUDAD SIN LEY
Es necesario aumentar los recursos del sistema judicial para agilizar y fortalecer su aplicación frente a posibles casos de corrupción urbanística, y con ello acabar con la ineficacia en la que están las actuales vías judiciales: costosas, lentas y tortuosas. Hace falta un plan de actuación eficaz contra el blanqueo de capitales económicos procedentes del narcotráfico.
5. LO PEQUEÑO ES HERMOSO
La pequeña propiedad necesita más protección legal y jurídica frente al poder de los urbanizadores, ya que estos privatizan la gestión pública y la misma política al suplantar la acción de las instituciones públicas en los planes urbanizadores. Los derechos de propiedad sobre viviendas y suelos no pueden sacrificarse sin una clara justificación de índole social o ambiental.
6. DINERO PARA LOS MUNICIPIOS QUE NO DESTRUYEN.
Más beneficios y oportunidades para las buenas prácticas en política municipal. Tiene que reformarse la forma de financiación municipal para que puedan obtener una ampliación y mejora de los recursos locales como recompensa de una política territorial responsable y conservadora de los valores principales del municipio. Esta financiación debe ser supra-municipal para premiar y dar ventajas a los municipios que conservan mejor sus valores ambientales y culturales, y desanimar con ello el crecimiento desbocado del municipio.
7. LA VIDA ES SIEMPRE ANTES QUE EL LADRILLO.
Todos los planes urbanizadores deben implicar la realización de una evaluación estratégica de los impactos ambientales que generan según exige la legislación europea. Especialmente deben valorarse aspectos como son: la conservación de la calidad y cantidad de los recursos hídricos a medio y largo plazo y de acuerdo con la Directiva Marco de Agua de la Unión Europea; la estricta protección de los espacios naturales al amparo de la Directiva Hábitat y la Directiva de Aves.
8. EL CAMBIO CLIMÁTICO EXIGE CAMBIO URBANÍSTICO
Los planes urbanísticos deben ser acompañados con planes de movilidad sostenible que impliquen giros y reequilibrios a favor del transporte público y de un balance energético eficaz con el fin de no aumentar el transporte motorizado y las emisiones contaminantes que contribuyen al cambio climático global. Todas las nuevas viviendas deben poseer la tecnológica ecológica más avanzada y los materiales menos dañinos para el medio ambiente.
9. LA CIUDAD MEDITERRANEA JUNTO AL MUNDO RURAL CONSERVADO
Conservar antes que destruir. Conservar y rehabilitar es innovación y es memoria, también es bienestar humano y natural. Las ciudades y pueblos compactos y abigarrados son mejores para la habitabilidad urbana y para la salud del planeta. Es prioritaria la conservación de los barrios históricos, la salida a mercado de las viviendas vacías, y la restauración de las zonas degradadas de las ciudades. Con un “crecimiento y mejora hacia adentro” hay que poner límites a la inacabable y voraz expansión urbana. Es necesario un freno radical a la invasión y sustitución de capitales naturales por el cemento y el ladrillo, y esto puede hacerse marcando claras diferencias y fronteras entre la ciudad y el campo, y poniendo estrictos límites al crecimiento difuso que como manchas de aceite se extiende alrededor de los cascos urbanos existentes. Hay que preservar los bienes y servicios naturales que son parte de la riqueza e identidad de la vida rural.
10. CIUDADES PARA LAS PERSONAS Y SU DIVERSIDAD.
Hay que salir de la fealdad repetida y anodina que está masivamente presente en las actuales formas urbanísticas. Al planificar el futuro urbanístico de deben tomar en cuenta las necesidades de grupos específicos y singulares, sus hábitos prácticos y sus culturas propias. Colectivos y grupos específicos como pueden ser las mujeres, la infancia, los discapacitados, o las personas mayores, suelen necesitar un entorno urbano más verde, más seguro y más saludable, más peatonal, con más transporte público, con más lugares para la calma para el disfrute y el encuentro social.
David Hammerstein
Son muchas las actividades económicas y científicas que utilizan a los animales vivos en experimentos: sectores y empresas comerciales (alimentación, cosmética, limpieza, química, etc.); la industria armamentística; los laboratorios farmacéuticos; las unidades de investigación de universidades, hospitales y veterinaria. En el mundo anualmente sufren y mueren millones de animales víctimas de la experimentación científica y a manos de la industria cosmética, farmacéutica, alimenticia o militar, pero muchos de los experimentos acaban siendo inútiles masacres de animales. Gran parte del sufrimiento animal inflingido experimentalmente, además de ser de dudosa moralidad es innecesario y superfluo ya que al carecer de una contrastada validez científica y utilidad social podrían suprimirse sin perjuicios para la ciencia y los seres humanos. 1. Del sufrimiento en la experimentación animal a su minimización y reducción. La obligación moral de respeto a los animales ha de limitar su uso experimental teniendo en cuenta las capacidades singulares de sufrimiento de cada individuo y especie. Han de refinarse las técnicas de experimentación animal para que causen el menor sufrimiento posible en los animales atendiendo a su sensibilidad neurofisiológica y su capacidad de padecer dolor, sufrimiento, estrés o lesiones prolongadas. Urgen ambiciosos planes europeos y estatales de reducción y eliminación del número de pruebas con animales empleados en todos los campos. Las instituciones y fondos públicos no han de tener intereses directos en la experimentación animal, y han de garantizar legalmente la tutela de los intereses de bienestar y los derechos de los animales. 2. Rigurosa aplicación del principio de sustitución si existen otros métodos experimentales disponibles, y en cumplimiento de las normativas europeas. Una mayor financiación europea para el desarrollo y validación de métodos de experimentación alternativos al uso de animales tal y como se regula por la legislación europea, y a través del JRC (Centro de Investigación Conjunta), el ECVAM (Centro Europeo para la Validación de Métodos Alternativos) y el Séptimo Programa Marco de Investigación y Desarrollo (2007-2013). Existen una variedad de técnicas de experimentación sin el empleo de animales, que además de constituir un elemento más ético en práctica científica, pueden ser más económicas y efectivas: el cultivo de células, tejidos y órganos; el uso de micro-organismos tales como las bacterias, la investigación molecular; los estudios con tejidos post-mortem; las simulaciones por ordenador; los estudios epidemiológicos de población e investigación clínica con voluntarios humanos que estén informados y den su libre consentimiento a las pruebas. 3. De la experimentación animal inútil y repetitiva al Registro público de datos sobre métodos alternativos. Es prioritaria la difusión e intercambio de los resultados experimentales para favorecer lo métodos alternativos a la experimentación con animales. Las tareas docentes e investigadoras de las universidades han de velar por el bienestar animal mediante el uso de métodos alternativos validados científicamente, y dando una formación específica en bienestar animal en planes de estudio, asignaturas y titulaciones. Estricta regulación pública sobre los centros especializados de experimentación animal sobre la identificación de los animales, condiciones de funcionamiento y personal con profesionales especializados en el bienestar animal.
4. Del secretismo científico y el sufrimiento animal a la transparencia ética de la ciencia. Numerosa experimentación animal es repetitiva y sus resultados se acumulan en bancos de datos privados bajo requisitos de opacidad. Los intereses comerciales hacen que muchos experimentos y resultados se oculten o se rechacen como confusos o irrelevantes si los datos que aportan frenan la rápida explotación comercial del nuevo producto. es necesaria la obligación legal de compartir y publicar todos los datos experimentales obtenidos con animales sin estar sometidos a los derechos de propiedad intelectual. 5. Las pruebas con animales comportan muchos peligros en sus aplicaciones humanas. Muchos de los resultados experimentales con animales no son extrapolables a los seres humanos, y pueden inducir a graves y peligrosos errores cuando estos productos llegan al mercado. La inexistencia de semejanzas absolutas entre los humanos y otros animales hace que numerosos experimentos resulten inútiles o dañinos para lo mismos humanos junto al padecimiento animal que comportan. Las diferencias metabólicas y de comportamiento con la especie humana hacen que las extrapolaciones de los resultados experimentales con animales sean arriesgadas. Pueden darse consecuencias perjudiciales en humanos que no se detectan en las pruebas con animales debido a que su anatomía, fisiología, metabolismo, psiquismo, biorritmos o comportamiento social son diferentes. También las condiciones artificiales de la experimentación con animales son muy distintas y distantes de los contextos diarios de la vida humana y en los que interaccionan numerosos factores sinérgicos que se acumulan y combinan dinámicamente. 6. De la alta variabilidad en los resultados de las pruebas animales a métodos alternativos más fiables científicamente. Existen grandes diferencias de respuesta entre las especies ante mismas sustancias y pruebas experimentales. El tremendo coste de sufrimiento animal no implica necesariamente un avance científico al existir una alta variabilidad de los resultados obtenidos. A mayor distancia evolutiva de los humanos con los animales experimentales, menor rigor científico de los resultados y menor utilidad humana en sus aplicaciones, y a mayor cercanía evolutiva los experimentos son éticamente más inaceptables.
7. De las pruebas animales inciertas y manipulables a una ciencia más rigurosa, compleja y éticamente comprometida. Mucha experimentación con animales vivos nunca han pasado por un riguroso proceso de validación científica en su metodología y conclusiones. Muchos experimentos a menudo se realizan bajo procesos de inercia, costumbre, o de rechazo de la innovación en el conocimiento. También actúan cultos intereses económicos ya que las pruebas con animales permiten un fácil maquillaje de los resultados en comparación con los experimentos in vitro y modelos informáticos, ya que estos introducen menos factores de subjetividad que aumenten la variabilidad de los resultados. 8. Buenas prácticas de bienestar animal mediante un etiquetado y sello acreditativo de la no experimentación con animales en el ciclo de investigación y desarrollo de los productos comerciales. Favorecería cambios socioculturales en a favor de un consumo más responsable con el bienestar animal. 9. Prohibición de las pruebas experimentales con los grandes simios. Derechos de éticos y legales de protección de los animales con capacidades emocionales, sensitivas y cognitivas superiores. 10. Creación de Comités Éticos sobre la Experimentación Animal en centros e instituciones que usen animales. En cumplimiento de las leyes de protección de los animales ha de darse una amplia participación política en la que tengan voz y opinión los especialistas en bienestar animal, las asociaciones médicas, veterinarias, psicológicas, biológicas, agronómicas… y grupos de afectados, junto a una diversa ciudadanía social. Derecho público reconocido a la objeción de conciencia en el ejercicio de determinadas prácticas de experimentación con animales. David Hammerstein
1. De la mascotización a la moral de cuidado y protección de los animales domésticos
Las relaciones humanas con los animales no humanos, se alimentan obsesivamente de una razón instrumental que elimina todo valor del animal por sí mismo convirtiéndolo en un mero medio o recurso al servicio de fines exclusivamente humanos. En la actual sociedad de consumo los animales domésticos pasan de ser objetos productivos a objetos mercantiles de disfrute y valorados por su utilidad hedonista. Es lo que llamamos mascotización, que en realidad es una forma de antropocentrismo que anula la consideración del animal doméstico como sujeto en sí mismo y como ser moralmente significativo y valioso. La mascota asume las cualidades de un simple objeto más de consumo y hace del animal vivo un simple producto del mercado que puede sufrir todos los usos propios de nuestra mentalidad consumista: el “usar y tirar”, la distinción social que da la adquisición de lo exótico, lo escaso y lo extinguible, la manía coleccionista, y el sobre-consumo. Para subvertir estos procesos de explotación sobre seres vivos sintientes es preciso redefinir nuestras concepciones y relaciones con los animales a partir del reconocimiento de la valía moral de los mismos. Debemos dejar de criar y usar animales domésticos y salvajes como simples medios para fines humanos hedonistas. Tenemos que desmantelar la aplicación de la idea de propiedad privada a los animales y sustituirla por la tutorización y el cuidado de los mismos. Mejor ser tutores responsables de un animal en familia que ser sus amos y propietarios, y así podremos favorecer los cambios socioculturales a favor de un trato moral y ético más digno sobre aquellos seres, que libremente conviven con nosotros.
2. Por una demografía de los animales en sociedad que visibilice el problema socio-ambiental de la tenencia y abandono de animales.
Los escasos estudios y la débil conciencia sociológica sobre la problemática animal ayudan al desconocimiento actualmente existente sobre la cantidad y realidad práctica de los animales domésticos que cohabitan en nuestro país. Se suele “presuponer” que cerca de la mitad de los hogares españoles tienen una animal doméstico, donde el perro y el gato resultan los líderes en el ranking de consumo. Pero salvo esta presunción, apenas hay interés en analizar con los instrumentos científicos de los estudios sociales la población animal existente, su repercusión social y los efectos económicos de estos animales, y por supuesto tampoco se conoce con datos fiables la cantidad de abandonos que generamos. Sin embargo, no es difícil inferir fundadamente que las cifras sobre la circulación y finalmente abandono de animales superan anualmente el millón. Se trata de una altísima cifra que no puede aligerarse por el porcentaje de hogares españoles predispuestos para la acogida y adopción. Por ello, la mayoría de dichos animales acaban en un Centro de Recogida y acaban siendo sacrificados sin más. Los testimonios de muchos activistas en la protección de animales señalan que estas cifras, apenas cambian de un año para otro. Es urgente la realización de estudios científicos que nos indiquen claramente las cifras de venta, posesión, abandono y sacrificio de animales de compañía. Creemos que levantar acta científica sobre la precariedad y la atroz realidad que sufre la gran parte de la población animal de nuestro país, es un paso imprescindible para la concienciación social sobre el maltrato animal.
3. Del abandono en las perreras a los Centros de Acogida de animales
Hasta ahora el estereotipo del abandono era el perro abandonado en la carretera o en lugares despoblados. Esta imagen todavía sigue siendo parte de la realidad, pero ya no solo se trata de este viejo modelo generalizado e incontrolado. Hoy nos encontramos con el abandono controlado, regulado y pautado para mayor eficacia social y sanitaria. Las administraciones han generado una opción más organizada y viable para aquél o aquella que desee deshacerse de su animal de compañía sin que ello suponga el cometer una ilegalidad y ocasionar cierto desorden social y sanitario. Partiendo de la necesidad social del abandono, se ha optado por una gestión supuestamente más racionalizada mediante el aprovechamiento de la proliferación de empresas privadas o públicas que actúan como mediadoras del problema mediante centros de recogida. Se trata de un nuevo servicio de recogida de un animal que puede ser depositado fácilmente en estos centros de manera regulada. Es decir, se cede a la empresa privada o a la gestión municipal dicho animal, y legalmente desaparece el posible delito al considerarse una simple cesión en lugar de abandono. De esta manera, el control por parte de la administración pública acaba siendo totalizador aunque es ocultamente muy traumático para los animales: no hay animales en las calles, todos se recogen en centros, y son eliminados en breves días. Mediante esta política pública de eliminación de los animales domésticos se legitima el abandono, como práctica sociocultural y se incentiva la dejación de responsabilidades del tutor o tutora del animal, apuntalando así una conciencia de débil compromiso hacia la hermandad animal que convive en nuestras casas. Las administraciones eliminan la responsabilidad moral y legal de un abandono convirtiéndolo en el negocio y lucro de empresas privadas o perreras, o bien descarga las responsabilidades cívicas y políticas sobre los centros de acogida altruistas o albergues de las asociaciones protectoras de animales. Además, la administración apuesta perversamente por racionalizar el gasto y la viabilidad económica en una perrera que sacrifica el animal a los diez días, antes que por una sociedad protectora que alarga la vida y el bienestar animal, aunque el coste económico resulte mayor. Contrariamente, las administraciones han de promover iniciativas de ejemplariedad moral, legal y social que protejan al animal del abandono. Las instituciones públicas han de dar prioridad a la gestión de centros de recogida llevados por las Sociedades protectoras legalmente constituidas, y han de apoyar su desarrollo para garantizar un trato humanitario a los animales abandonados.
4. Los animales salvajes como objetos exóticos para la distinción social.
No sólo los perros y gatos son objeto de mercancía y abandono, ya que cada vez más se perciben como objetos comunes y vulgares que pierden su valor social de distinción. Se ha puesto de moda comprar y regalar animales “exóticos” (loros, iguanas, ardillas, camaleones, hurones, tortugas, serpientes…). Su compra y adquisición marca una diferencia y reconocimiento social distintivo, y las razones para su compra pueden ser de diferente tipo: por snobismo, decoración del hogar, por un falso acercamiento a la naturaleza. La consecuencia de una decisión inicialmente frívola suele ser una conciencia superficial de compromiso, y finalmente buena parte de estos animales son abandonados, tirados a la basura o acaban muriendo por falta de cuidados adecuados. Estos animales, que habían nacido libres y en sus ecosistemas naturales, son condenados a unas condiciones extrañas y muy artificializadoras en la estrechez de un terrario, una jaula o una pecera, cuando su hábitat natural es el inmenso espacio del aire, el agua o el bosque. Su aniquilación ya comienza en el proceso de captura y transporte en el que el 80% de estos animales mueren, ya que se transportan en condiciones dantescas: atados y amordazados, envueltos en papel de periódico, en el fondo de cisternas o contenedores, en cajas y maletas, y siempre en la más absoluta oscuridad de los almacenes de barcos y camiones. En paralelo, esta maquinaria lucrativa incentiva la esquilmación de los ecosistemas de origen y la biodiversidad en países generalmente periféricos y sin leyes y mecanismos de protección. Es urgente frenar y condenar la adquisición de estos animales como objetos de consumo con todo tipo de controles y medidas legales, lo que además ayudaría a la protección medioambiental en los países de origen y al desarrollo de una conciencia ética medioambiental de respeto a la naturaleza y a los seres vivos que la habitan.
5. Una ley estatal para acabar con la gestión pública municipal favorece la superpoblación, el maltrato y abandono de animales
Las mismas instituciones públicas pueden desarmar, dejar sin operatividad o incluso pervertir el espíritu de una ley teóricamente benéfica para el bienestar animal. La gestión pública que promueve el establecimiento de las leyes tiende a desconocer las consecuencias sociales generadas por su misma aplicación o por la ausencia de leyes reguladoras. Se pervierten así las leyes de cuidado animal si a la vez no se acompañan de una planificación estratégica, de una comunicación y participación sociocultural, o de una adecuada gestión de los recursos. Suele darse una correlación entre la rigidez en al aplicación de la normativa en contextos sociales de desinformación y los abandonos masivos de animales en ciertas zonas de nuestro país; igualmente, defectos en la política de comunicación entre las administraciones responsables y la ciudadanía han producido a menudo tipos de alarma social en relación a la tenencia de animales, por ejemplo la “perrofobia”. En las autoridades locales y la administración municipal están las competencias en la regulación de los animales domésticos, pero estas apenas aplican las leyes que tienen a su disposición siendo por tanto coparticipes de la superpoblación, maltrato y abandono de animales domésticos. Paradójicamente, al ser los únicos responsables en la ejecución de las leyes resulta casi imposible sancionar a la propia administración por incumplimientos legales. Además, existen legislaciones autonómicas muy diferentes dentro del Estado, lo que dificulta aún más la aplicación de sanciones. Por ello, resulta necesaria la creación de una ley estatal que unifique, ordene y aglutine las respuestas y soluciones al maltrato y abandono de animales que se produce en todo el estado español. Es urgente una ley estatal que vigile y sancione el reiterado incumplimiento de las administraciones locales., y a la vez, también son precisas unas dotaciones suficientes de los recursos adecuados para su aplicación eficaz. Además, no pueden dejarse de lado los objetivos de impulsar cambios sociales a favor del cuidado y el respeto hacia los animales en muchos hábitos cristalizados de nuestras creencias y costumbres.
6. Por el control estricto del comercio y la cría de animales.
El comercio de animales sin regulación se supedita a la lógica del máximo beneficio privado y reduce al animal a una mera mercancía. Incluso, si de diera el caso excepcional de un “criador” que posea la licencia de núcleo zoológico para permitirle criar y vender animales legalmente, esto no asegura el cumplimiento de un catálogo de buenas prácticas de bienestar animal. En muchos casos estos criaderos que alimentan las tiendas de mascotas y centros comerciales de nuestras ciudades, son simplemente “fábricas de cachorros”. Desde hace unos años están entrando en el Estado Español una gran cantidad de perros provenientes de los países del Este de Europa, llegan en camiones abarrotados y su precio es muy bajo. Las malas condiciones del largo viaje son causa de la altísima mortalidad de cachorros cuya pérdida económica se suple con los bajos precios de adquisición. Aun así, una vez vendidos a particulares, muchos animales fallecen debido a diferentes factores (como son los defectos congénitos inherentes a las razas llamadas “puras” y debilidad del animal, entre otros). Sin embargo, esto no es una práctica aislada; muchos criadores de razas específicas, aun procediendo del mismo Estado Español, realizan prácticas eugenésicas que extenúan y acortan la vida de las perras y gatas haciéndolas parir sin descanso, y se deshacen de los cachorros que no cumplen con los cánones de perfección establecidos. Por ello, es preciso el control legal y sancionador estricto de las condiciones de cría y del comercio con animales, domésticos y salvajes, con la aplicación estricta de sanciones a aquellos que no estén habilitados para tal fin. Además, esta reglamentación debería contemplar la regulación de canales informales de compra-venta de animales.
7. De los valores culturales y la educación antropocéntrica a un biocéntrismo no especista.
A inicio del siglo XXI, el sistema de enseñanza mantiene en sus planes de estudios, asignaturas, y proyectos curriculares de docencia e investigación un prejuicio antropocéntrico incuestionado y que parte del siguiente falso supuesto: que sólo los seres humanos son objetos de consideración y responsabilidad moral, mientras que ésta es negada a entidades naturales no humanas o a la naturaleza. La Naturaleza es concebida así como un mero objeto inerte de explotación sin límites. Es necesario modificar esta percepción cultural y los valores que la sustentan otorgando un lugar diferente y dignificado moralmente a la Naturaleza y los animales , en el que juegue un papel central la ética de la compasión, el cuidado y la empatía como nuevas virtudes morales importantes en nuestra sociedad. Tenemos que generar cambios en el concepto moderno y reduccionista de la moral, el derecho y la política al incorporar la consideración y trato moral de los animales y el medioambiente. Es preciso que las instituciones impulsen la eliminación del antropocentrismo fuerte dentro de las leyes y políticas medioambientales, económicas, culturales y jurídicas. La alternativa es situar a la vida y sus valores básicos de cuidado, salud, disfrute y continuidad como principio y categoría central –desde lo íntimo a lo planetario- en un continuo cualitativo que constituye la propia existencia, conservando y ampliando así las aportaciones históricas y culturales del mejor humanismo europeo, pero sin sucumbir a su propio mito fáustico de superioridad humana en base a sus sueños omnipotentes de “razón y progreso”. La dependencia, la conexión, la modestia y la generosidad con los “otros animales” también han de reconocerse como virtudes morales de guía y orientación práctica en nuestras formas de vida. Los seres humanos y nuestras sociedades no somos una especie superior que pueda escapar de los límites y determinismos naturales y ecosistémicos. Es preciso reconsiderar que cada organismo vivo y sintiente merece el reconocimiento de lo que le es propio y el respeto hacia lo que la propia naturaleza le otorgó con su existencia.
8. Las Sociedades Protectoras son gestoras del bienestar de los animales abandonados.
Ninguna empresa sin un estricto código ético de conducta basada en el bienestar animal debería estar autorizada para la recogida de animales abandonados en la calle. Los ayuntamientos realizan contratos con empresas con ánimo de lucro para el tratamiento de los animales pese a que existen asociaciones y ciudadanía organizada que solicitan realizar el mismo servicio, y que además ya asumen un estricto código ético en el trato con los animales. Muchas de estas empresas realizan prácticas ilegales, tales como negar la alimentación a los animales, sacrificarlos de manera dolorosa, ausencias de veterinarios, o la no localización de sus tutores. Cientos de miles de perros y gatos son sacrificados anualmente en el estado español, y los ayuntamientos prefieren pagar con dinero público las matanzas sistemáticas sin que se les de una mínima oportunidad de vida digna a los animales. Con estas políticas mercantilizadoras del maltrato animal las administraciones debilitan a la vez al movimiento ciudadano emergente y altamente comprometido, que aglutina en su diversidad todo el espectro de edades, ideologías políticas y perfiles sociales. El activismo y la constancia de las sociedades protectoras es un ejemplo cívico de acción colectiva comprometida y orientada a la resolución de problemas y conflictos prácticos, pero que no abandona una perspectiva crítica sobre las graves responsabilidades y la implicación de la administración en el agravamiento del problema. Es preciso, que las mismas administraciones ayuden a fortalecer este movimiento ciudadano para el cuidado animal. La eficacia y la autoridad moral de las asociaciones protectoras deberían primar sobre el interés lucrativo de las empresas privadas.
9. De los sacrificios sistemáticos y las ventas ilegales a las esterilizaciones e identificaciones obligatorias.
Al aceptar la entrada de un animal doméstico en nuestra vida estamos implícitamente comprometiéndonos como tutores con cierta planificación sobre la capacidad reproductiva del animal recién llegado. Si el abandono no ha de ser una opción posible y el sacrificio es moralmente despreciable, sólo quedará la opción de influir sobre la capacidad reproductiva del animal: la esterilización. Pero actualmente en el Estado Español no es obligatoria la esterilización de los animales de compañía como sucede en otros países europeos. La esterilización es una realidad ampliamente aceptada en los países más desarrollados, donde el bienestar del animal es primordial para su tutor. Mientras que esta práctica nos se generalice, se generarán anualmente cientos de miles de perros y gatos que la propia sociedad no puede asumir. Esto conduce al sacrificio sistemático y éticamente injustificado que se desarrolla en las propias clínicas veterinarias y en las empresas privadas y públicas habilitadas para tal fin. Debemos exigir la implicación de la administración y promover la aceptación social de la esterilización de sus animales de compañía; así como evitar, sobre todo, la política de supresión de los animales excedentes y finalizar de una vez por todas con las matanzas sistemáticas de animales en las perreras, una práctica que se sigue dando en la mayoría de las poblaciones del estado español. Además de la gestión de la población de animales, es exigible la identificación del animal. No es posible una eficiente política sobre dicha población, su seguimiento, su protección en todos los sentidos si no se identifican los animales y se ubican en un núcleo familiar. Sin embargo, la identificación de animales, pese a ser obligatoria por ley, sigue sin ser sometida a control por parte de la administración local, lo que favorece la desidia y despreocupación por parte de la ciudadanía.
10. De las ilegalidades y el maltrato animal a la creación de la figura del Defensor del Animal.
Dentro del marco legislativo de los animales de compañía se ha de crear la nueva figura del “Defensor/a del Animal” dado que los colectivos proteccionistas, en innumerables ocasiones se encuentran indefensos ante determinadas vulneraciones de la legislación vigente en materia de protección de los animales de compañía. Son necesarios más mecanismos que protejan a los ciudadanos de los errores o el malfuncionamiento de las administraciones. Igualmente, cuando el animal empieza a ser reconocido con cierto estatus de ciudadanía (al menos como objeto de ciertos derechos, y su tutor sujeto a ciertas obligaciones), es preciso disponer de una añadida figura jurídica de protección que vigile que las disfunciones. Una tarea principal del Defensor del Animal ha de ser la de perseguir las «irregularidades» que cometen instituciones y algunos ayuntamientos que incumplen la legislación vigente, y que en este momento tan solo se pueden perseguir mediante la presentación de contenciosos administrativos. También es importante la creación del “Consejo Asesor para la Protección de los Animales” para la coordinación y expresión pública de las necesidades y problemas que tienen las organizaciones cívicas de protección animal, tradicionalmente muy olvidadas por algunas instituciones.
David Hammerstein
1. La desaparición de animales y especies exóticas
Animales que durante milenios han ocupado selvas, océanos y desiertos, viven hoy en salas de estar, terrazas de apartamentos, bares... No solo desaparecen animales y especies autóctonas de nuestro entorno, sino que se incentiva la aniquilación de especies y biodiversidad en otros países, sobre todo las procedentes del tercer mundo. El mundo industrializado en su actual desregulación y economía globalizada comercia con animales exóticos en lo que resulta ser un negocio muy lucrativo. A este nuevo mercantilismo zoológico global se une al hecho de que hoy los animales no humanos siguen teniendo el status cultural de propiedad sin derechos y de simples objetos instrumentales. Las tiendas especializadas del mundo rico se han convertido en un inmenso bazar donde es posible adquirir casi cualquier tipo de animal con un auténtico servicio a la carta. Los animales son apartados de sus hábitats naturales que se degradan para terminar sus vidas cautivos de un medio que les es hostil.
El tráfico ilegal de especies es una de las causas más importantes de pérdida de biodiversidad en el mundo, y además es un negocio redondo al estar poco perseguido y tener poco riesgo. La poca sensibilización ciudadana así como la falta de actuación de las autoridades hace que este tráfico está aumentando. Los datos estadísticos revelan las demoledoras dimensiones del comercio internacional de especies y animales protegidos. Según los datos del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) 230.000 primates vivos se compran y venden cada año; 1,13 millones de aves vivas; 4 millones de reptiles; 15 de pieles de mamíferos; 9 de orquídeas; 7 de cactus; 350 de peces tropicales... Pero la gran mayoría del 60% y hasta el 80% muere en el viaje.
De todos los animales vivos que recorren el mundo de contrabando el 60 y 80 por ciento mueren durante la captura, transporte y comercialización posterior. Los animales que sobreviven son vendidos en tiendas de mascotas, en ferias callejeras o son exportados. Mueren a menudo al poco tiempo de ser comprados, víctimas del estrés del cautiverio, la depresión o por enfermedades que hasta pueden ser transmisibles a los seres humanos. Finalmente los animales silvestres pueden terminar perdidos en las urbes, se escapan, son regalados o abandonados.
4. El ineficaz control internacional del comercio de fauna y flora
Teniendo en cuenta que el comercio de animales y plantas silvestres sobrepasa las fronteras entre los países, su reglamentación y control requiere la cooperación internacional a fin de proteger ciertas especies. El Convenio de Washington CITES firmado en 1973 y en vigor desde el año 1975 ha sido subscrito por más de 150 países tiene el fin primordial de la conservación de miles de especies de fauna y flora mundiales mediante la regulación de su comercio. CITES ofrece diversos grados de protección a más de 30.000 especies de animales y plantas, tanto vivos como derivados del mismo. Protege un grupo de especies en peligro de extinción y especies que no necesariamente se encuentran amenazadas de extinción, pero tienen el riego de estarlo. Y un tercer grupo de especies están sometidas a la jurisdicción de cada país, y para las cuales el comercio no se puede controlar sin la cooperación de otro país parte de CITES. El CITES otorga permisos de exportación para el país de origen y de importación para el de destino. Pero, la mayoría de los países no han desarrollado su propia legislación, lo que hace ineficaz el convenio haciendo impune el tráfico de especies. La permisividad de leyes y controles se dan tanto en los países de origen como en el receptor. Los traficantes de especies falsifican documentos oficiales, pagan sobornos y hasta llegan a hacer declaraciones aduaneras fraudulentas.
5. La esquilmación de la biodiversidad en los países de origen
Cada año se expolian numerosas zonas naturales de nuestro planeta, principalmente en el trópico, en busca de especies exóticas vegetales y animales que buscan complacer la excentricidad y gustos consumistas. Son compradores también los coleccionistas, los zoológicos, los laboratorios de investigación biomédica, las tiendas de animales. Los compradores son principalmente Estados Unidos, la Unión Europea y Japón, y los principales vendedores son países pobres como los de Sudamérica, África y el Sudeste asiático. Pero el beneficio económico del comercio ilegal de especies no revierte en estos países pobres que sacrifican sus ecosistemas y economías locales. La alta mortandad de animales comporta una extracción masiva para compensar las grandes pérdidas de individuos durante el proceso comercial, y es un factor central de esquilmación para muchas poblaciones animales, cuya disminución provoca efectos directos sobre otras especies y ecosistemas, al desestabilizar la cadena alimentaría y causar la multiplicación de plagas, y a. además alimenta la espiral de pobreza que incide en las familias y economías de subsistencia que dependen directamente de los recursos naturales locales y de su renovación y acceso a los mismos.
6. España: un paraíso para el tráfico y comercio ilegal de especies
En 1986 España ratificó el CITES, pero el suelo español es utilizando principalmente como punto de canalización de animales protegidos hacia otros países de Europa y EE.UU. Por España pasa el 30% del tráfico mundial, pero sólo es detectado el 50% del tráfico.
España acoge una valiosa riqueza faunística que induce la caza de nuestra fauna autóctona para su comercialización. Furtivos y mafias organizadas peinan los campos y montes españoles en busca de víctimas que cazar y vender: Desde osos pardos, rebecos, urogallos, linces, hasta águilas imperiales o halcones peregrinos, pasando por toda suerte de pajarillos o galápagos. De esta forma, huevos de aves en peligro de extinción y animales protegidos son cazados furtivamente, disecados, almacenados y posteriormente comercializados, pasando a engrosar colecciones particulares o de ciertos museos, y vendidos en mercados ambulantes y rastros. Además, en España existe otro peligro: “la liberación de especies” foráneas al medio natural que incide en la extinción de muchas de nuestras especies y hábitats autóctonos.
9. Freno al comercio legal e ilegal de animales salvajes
La normativa de CITES prohíbe comerciar con animales ilegales pero no con los legales. La cría en cautividad de especies salvajes para su comercialización está permitida y es legal, pero carece de control efectivo para evitar el tráfico ilegal. Los compradores acaban desprendiéndose del animal comprado y para ello utilizan tres vías: depositarlo en centros de acogida, regalarlo o malvenderlo, o liberarlo en la naturaleza. Los hábitos culturales de la sociedad española en cuanto a la posesión de mascotas exóticas son de gran irresponsabilidad, y apenas existen centros de recuperación de fauna salvaje con recursos en nuestro país, lo que empuja en mayor medida a desprenderse de los animales a través del sacrificio o con su abandono. Se da un descontrol y escaso seguimiento por parte de las Administraciones de la venta “legal” de animales salvajes. Los requisitos legales para el registro y control de la cría y venta apenas son supervisados por las autoridades.
Demandas VERDES……..
1. Incrementar los requisitos legales tanto para la venta como para la compra y tenencia de animales exóticos. Las competencias sobre el control de especies ha de ser mas extensa y cohercitiva
2. Presionar a las autoridades competentes para que se ejerza un mayor control en la entrada de animales salvajes ilegales a nuestro país
3. Desarrollar una legislación específica con presupuesto sobre los Centros de Recuperación de Fauna Salvaje
4. Desarrollar campañas educativas y de concienciación a la ciudadanía para el no consumo de animales salvajes
5. Desarrollar programas de Cooperación Internacional donde se transformen las pautas económicas locales basadas en la captura y comercialización de especies salvajes autóctonas con la consiguiente degradación de su entorno.
6. Controlar la adquisición de especies por parte de zoológicos y circos.
7. limitar la cría en cautividad de especimenes salvajes y no fomentar con ello la degradación del uso y abuso de estos animales. Por el contrario, desarrollar programas de conservación de especies salvajes en sus hábitats naturales.
8. Incorporar en los planes educativos dentro de la Educación Medioambiental el concepto de respeto por los animales, ya sean salvajes o domésticos.
David Hammerstein
1. Ciencia abierta
Los Verdes queremos un máximo de transferencia e intercambio libre de conocimientos científicos e informaciones técnicas. Deben evitarse aquellas patentes que puedan ser un obstáculo a la innovación para pequeñas y/o jóvenes empresas. Por el contrario, todos aquellos incentivos que fomenten el compartir de conocimientos y la transferencia de tecnologías han de promoverse, para que las empresas, a la sociedad civil y las universidades puedan desarrollar, gracias a dicha intercomunicación, puentes entre la investigación y la necesaria renovación económica y tecnológica en las sociedades actuales.
2. Ciencia por y para la gente
Debe fomentarse un dialogo abierto entre científicos y ciudadanos. Las opiniones de los investigadores han de confluir con aquellas de quienes no son necesariamente expertos, pero si personas conciencias con la sociedad y el medio ambiente. En otras palabras, la participación y el debate público en el ámbito de las políticas de investigación a seguir es un elemento fundamental de su éxito.
3. Lo pequeño es hermoso
La financiación de pequeños laboratorios, pequeñas universidades y PYMES debiera ser una prioridad en los programas europeos. Ellos crean la mayor parte del empleo y son fuente de estabilidad económica. Por tanto, han de promoverse iniciativas como las de crear clusters de pequeñas empresas a nivel europeo -en lugar de tender exclusivamente a su concentración-, el fomento de la labor de los parques tecnológicos, donde las PYMES puedan usar y explotar el conocimiento compartido. Sin duda alguna, es un hecho que la imaginación compartida es el camino para progresar para la gran mayoría de de empresas y negocios europeos.
4. Menos burocracia y más transparencia
El acceso público claro e inteligible a la información ha de garantizarse para todo el proceso de evaluación y financiación de proyectos de la UE. La Comisión Europea debe reducir los costosos procedimientos administrativos, ya que suponen la marginalización de los grupos de investigación, empresas y ONGs que por su tamaño reducido no puede hacerles frente, y por tanto, quedan en la cuneta de la financiación comunitaria.
5. De vuelta a lo básico
La investigación científica básica debe ser apoyada abiertamente y con mas fondos. La política científica europea no debe regirse exclusivamente por lo que dicten los intereses tecnológicos en los mercados de valores de compañías multinacionales. Ha de haber un respaldo público a la investigación básica con objetivos sociales y medio ambientales a medio y largo plazo. De hecho, los fondos estructurales debieran financiar infraestructuras para posibilitar dicha investigación básica. Sin duda alguna, la investigación y el desarrollo puede en muchos casos ser más beneficiosa a largo plazo que más carreteras y aeropuertos.
6. Investigar en salud
La ingente cantidad de dinero destinada a financiar el desarrollo farmacéutico debiera ser reconducida, ya que se destina primordialmente a la investigación para mejorar los tratamientos que no son los más útiles socialmente. Mientras tanto, la financiación de la investigación destinada a la precaución esta marginada. La salud pública y la medicina preventiva necesitan mucho más dinero del que actualmente reciben, para poder realizar estudios de la importancia de los análisis epidemiológicos y toxicológicos sobre las causas de multitud de 'enfermedades modernas'. Temas de gran relevancia como la salud reproductiva y la prevención en la salud infantil merecen mayor atención. Igualmente, aquellas enfermedades que tienden a afectar o afectan exclusivamente al Sur de nuestro planeta debieran inmediatamente de estar infra-financiadas.
7. Ciencia para un buen clima:
Los programas de investigación europeos debieran prestar mayor atención a los proyectos dedicados a estudiar el cambio climático. La investigación en favor de las energías renovables debería aumentarse al menos al nivel del EURATOM o del programa de fusión ITER. La situación actual en Europa, en la cual toda la inversión en energías renovables junta tan solo supone una fracción de la invertida en investigación en energía nuclear debe cambiar radicalmente.
8. ¡Las ciencias sociales son también ciencia!
Comprender el mundo en el que vivimos, la interdependencia de los problemas que hemos de afrontar en las sociedades actuales, tales como el cambio climático, la pobreza, los choques culturales, etc. es igualmente una labor a realizar y que no debemos subestimar. Por ello, la financiación de la investigación en ciencias sociales es un complemento imprescindible para el avance en la investigación en ciencias naturales.
9. Un Consejo Europeo de Investigación independiente
Ha de promoverse la creación de un verdaderamente independiente CEI, que promueva los proyectos de alta calidad, y que se rigen por la mera curiosidad científica (y no por intereses económicos). Dicho organismo debiera financiar proyectos a largo plazo, ya que la investigación científica necesita tiempo. La garantía de la continuidad es un elemento fundamental para una investigación sólida y fructífera. Y, además, quizás esta sea la mejor vía que Europa pueda seguir si quiere recuperar la competitividad perdida en comparación con otras regiones planetarias.
10. Principio de Precaución frente a la sociedad del riesgo
El principio de precaución debe ser integrado en todas nuestras prioridades de investigación. Este principio entra en contradicción clara con financiación masiva de la creación de organismos genéticamente modificados, de algunas formas peligrosas de la nanotecnología y de muchos programas nucleares y al mismo tiempo crea oportunidades en nuevos campos de innovación ecológica. En cambio, fondos públicos deben ser orientados hacía la fomento de alternativas a las tecnologías potencialmente dañinas y sustancias químicas tóxicas. También necesitamos un apoyo fuerte para desarrollar a las alternativas existentes a las pruebas científicas con animales.
David Hammerstein