Los Verdes no estamos en contra de la nanotecnología. Consideramos que el medio ambiente, la medicina y algunos sectores de la economía podrían beneficiarse bastante de las investigaciones de la nanociencia. Sin embargo, debemos proceder con precaución antes de comercializar los productos. Los que desprecian la precaución no son amigos del progreso firme de nanotecnología y acabarán deteriorando la confianza de los consumidores. Actualmente estamos apretando el acelerador de la maquina de la nanotecnología sin asegurar antes si tenemos frenos de emergencia, sin ni siquiera saber si la dirección funciona.
Ya se están utilizando nanopartículas en productos de consumo sensibles sin saber sus posibles impactos sobre la salud y el medio ambiente. Cosméticos, detergentes, pinturas, textiles ya comienzan contener nanopartículas. Con nuestra despreocupación posiblemente estamos preparando el camino para un gran escándalo sanitario futuro. Pedimos más estudios, una regulación clara y la aplicación del principio de precaución. El Comité Científico de la Comisión Europea (CCRSERI) afirmó en una comunicación del 28 de septiembre de 2005 que carecemos de los conocimientos necesarios para la evaluación de los riesgos, por ejemplo en lo referente a la caracterización de las nanopartículas, la detección y la medición de las nanopartículas, los datos dósis-respuesta, la evolución y la persistencia de las nanopartículas en el ser humano y en el medioambiente. Según el CCRSERI los métodos toxicológicos y ecotoxicológicos existentes no son suficientes para hacer frente a todos los problemas que plantean las nanopartículas. Algunas nanopartículas actúan de forma muy diferente de partículas más grandes. El problema principal es que la liberación no controlada nanopartículas puede ser muy peligrosa. 2) Nanopartículas son mas reactivas químicamente y son fácilmente oxidables por el oxigeno para producir radicales que son muy reactivos 3) Nanotubos incluso pueden comportarse en el cuerpo de una madera similar a la de las fibras de amianto, causando cáncer de pulmón. 4) Una vez liberadas en el medio ambiente, muy poco se sabe del comportamiento/reacciones de nanopartículas-un empuje de la CE fuerte de investigación e es necesario en este campo. Sin embargo solo una pequeña fracción de la inversión europea se gasta en estudios de riesgo y impacto. 5) Que es lo que sigue después de la penetración creciente de materiales artificiales en nuestros cuerpos y la integración de maquinas externas (nanomáquinas) en nuestro organismo por nuestra propia identidad y consciencia de identidad? Ni las preguntas biológicas ni las éticas tienen respuesta ni regulación. Por estas razones debemos frenar desarrollo de la nanotecnología en campos pontencialmente peligrosos y plantear una legislación europea sobre su utilización para proteger la salud y el medio ambiente. David Hammerstein