Ante una emergencia hay que tomar medidas valientes. Hasta ahora no se ha hecho prácticamente nada. Porque hay que aceptar que un poco de eficiencia y modernización no bastan. En València es peor aún: se siguen aprobando obras y proyectos que empeoran la situación climática. No nos damos cuenta que es más urgente reducir las cosas malas anti-clima que hacer las cosas buenas más “limpias” que no suelen sustituir sino sumarse al status quo. Si nos limitamos al cambio de tecnologías y la eficiencia no haremos nada y seguiremos fomentando el colapso. Es totalmente inútil tratar los problemas al final de la tubería (solo mediante medidas de reciclaje, depuración y eficiencia) mientras empeoramos todos los indicadores de volúmenes totales de consumo extractivo material, urbanismo, obras, turismo, ganadería, agricultura, agua, transporte y todo lo que representa energia. Según un estudio reciente de la ONU la mitad de las emisiones de CO2 y 80% de la destrucción de la biodiversidad proceden de la industria extractiva (minería, agricultura, madera de cualquier punto del mundo), o sea el consumo, y no de la quema directa de los combustibles fósiles del transporte, calefacción o la industria.
¿Qué hacer en Valencia?
1. Frenar la expansión urbanística de docenas miles de nuevas viviendas, que no responden a una ninguna necesidad social sino una demanda financiera de los bancos e inversores. Esta expansión urbanística representa una gran barrera para alcanzar unos objetivos climáticos ambiciosos, para la imprescindible reducción de la extracción de materiales que atentan contra la biodiversidad, un menor consumo de energía y mucho menos uso del coche particular. Teniendo en cuenta, por ejemplo, los planes urbanísticos expansivos anti-clima en marcha en los barrios de València del Grau, Benimaclet, Malillia, Parc Central, el Cabanyal y otros lugares,
¿Como pretende su partido que el urbanismo valenciano permita afrontar la emergencia climática con más garantías?
2. La salvaguarda de las tierras fértiles de la huerta para la agricultura de proximidad es un valor muy importante para afrontar el futuro en el contexto del actual desorden climático. Distintos proyectos anti-clima, como la expansión del Puerto sobre la huerta de La Punta, “el túnel pasante, el PAI de Benimaclet, entre otros planes urbanísticos i varias ampliaciones de autovías amenazan la huerta valenciana y otras huertas valencianas.
¿Que medidas tomará su partido para defender la tierra fértil de la huerta?
4. En los últimos 4 años han crecido sustancialmente en la ciudad y en la zona metropolitana de València las emisiones contaminantes e insalubres procedentes de los coches particulares y de los camiones y furgonetas de mercancías(Se aumentaron las emisiones del transporte el 2.3% en el 2017). Actualmente, están en marcha proyectos de ampliación de las autovías V30, V31, V21 y del Bypass de València, entre otras infraestructuras viarias lo que aumentará el uso de coches y camiones con emisiones climáticas e insalubres. Sabemos que la mejora del transporte público no basta para reducir emisiones y mejorar la salud pública. Para mejorar la calidad del aire y reducir las emisiones hace falta medidas de restricción y regulación.
¿Qué medidas pretende tomar su partido para reducir marcadamente el uso del coche particular para los desplazamientos y los camiones/furgonetas para el reparto de mercancías? Apoya su opción política las únicas medidas europeas con éxito para mejorar la salud y la calidad del aire(reduciendo la circulación en más del 30%) en la ciudad implican la introducción de peajes urbanos, la restricción drástica del aparcamiento gratuíto y para no-residentes (como las miles de plazas en esta zona universitaria) y el aumento sustancial del espacio peatonal y ciclista?
5. El turismo está en pleno auge con millones de turistas visitando nuestra tierra. El aumento del turismo en València(más de 2 millones de turistas y 5.5 millones de pernoctaciones) ha disparado las emisiones climáticas procedentes de aviones, cruceros, autobuses, alojamientos turísticos además de aumentar el consumo de todo tipo de materiales contaminantes y la generación de más residuos de todo tipo(cada turista consume mucho más y emiten más emisiones por día y por persona que un residente).
¿Como intentará su partido reducir el gran impacto ambiental y climático del turismo de masas?
6. El actual modelo energético centralizado, sucio y privado está roto y no sirve para reducir la demanda energética. Es urgente un cambio radical. Más de 80% de nuestra energía total procede de combustibles fósiles y este porcentaje apenas se ha movido en los últimos años. València debe invertir en fomentar la energía renovable descentralizada comunitaria controlada por la vecindad en partneriados público-cívicos. Hace falta construir microredes de electricidad que pueden operar de forma semi-autónoma de las redes centrales para facilitar el intercambio de energía entre la ciudadanía, un modelo que constituye un factor de resiliencia frente el caos climático.
València necesita un plan vinculante para una rápida transición energética con metas cuantificables, medibles y transparentes para alcanzar antes del final de esta legislatura en 2023. El Ayuntamiento debe declarar el estado de emergencia climática y adaptar todas sus políticas al estado de emergencia. El consistorio debe crear una asamblea ciudadana para asegurar el cumplimiento de los compromisos de reducción drástica de emisiones y la protección de la biodiversidad de la extinción.
¿Acepta su candidatura estas demandas?